Supongo que alguna que otra vez le ha pasado a alguien mas que a mi, el hecho de que te pregunten ¿cómo estás? y te quedes pensando en qué contestar (aunque finalmente digas ‘bien’ por decir algo)
Ese momento en el que dudas, ese instante en el que reflexionas sobre cómo estas realmente, pues no lo sabes con seguridad.
Intento adivinar por que me siento así, tendría muchas cosas por las que sentirme bien, menos por las que sentirme mal, pero aun así no me siento bien, no encuentro lo que antes me llenaba, lo que me daba esa alegría para estar todo el día sonriendo, para reírme por cada pequeño momento que tenía lugar en mi vida, hecho de menos muchas cosas pero es eso lo que más me atormenta, sin lo que no podría ser feliz.
Algunos me dicen que si quisiera lo tendría antes de que me diera cuenta, pero no puedo evitar pensar primero en los demás y después en mi, es más me resulta difícil pensar en mi, en lo que quiero, en lo que me gustaría hacer, en lo que me atormenta por dentro…
Me siento rara o es que seré idiota ¿?
Ese momento en el que dudas, ese instante en el que reflexionas sobre cómo estas realmente, pues no lo sabes con seguridad.
Intento adivinar por que me siento así, tendría muchas cosas por las que sentirme bien, menos por las que sentirme mal, pero aun así no me siento bien, no encuentro lo que antes me llenaba, lo que me daba esa alegría para estar todo el día sonriendo, para reírme por cada pequeño momento que tenía lugar en mi vida, hecho de menos muchas cosas pero es eso lo que más me atormenta, sin lo que no podría ser feliz.
Algunos me dicen que si quisiera lo tendría antes de que me diera cuenta, pero no puedo evitar pensar primero en los demás y después en mi, es más me resulta difícil pensar en mi, en lo que quiero, en lo que me gustaría hacer, en lo que me atormenta por dentro…
Me siento rara o es que seré idiota ¿?
1 comentario:
Ya sabes, el primer paso para estar contento es querer estarlo: a menudo, somos nosotros mismos quienes nos autoimponemos barreras. Nos quejamos por autocomplacencia, inconscientes o ignorando a propósito que tenemos el mundo a nuestro alcance. A veces se debe a inseguridad, otras a simple estupidez.
Claro que, yo, no puedo evitar asociar la palabra idiota con El idiota de Dostoievski. Y me caía tan bien, aunque su compasión por los demás lo llevara a la tragedia...
Publicar un comentario