viernes, 17 de septiembre de 2010


Y aquí me ves, sigo viva que es lo importante ¿no? Jajaja
Venga va ya fuera de coña, os cuento que tal la experiencia por ahora (pues ya deberíais saber que mi humor cambia mas que el viento)

Todo nuevo: nuevo lugar donde depositar mis pies, nuevos horizontes por donde dejar vagar la imaginación, aires cálidos que te hacen añorar tantas cosas…
Los primeros días es casi lo único que ocupa tu mente: el recuerdo, después las comparaciones con tu ciudad, la añoranza de tus costumbres, l@s hermanit@s pejiguera@s que se hacen querer, amig@s que tardaras en ver, casi todo te hace estar los primeros días con el teléfono echando humo…

Empiezas a caminar, con un rumbo fijo pero sin ganas de ir en línea recta, sabes que si lo haces acabarás perdida en medio de todo y de nada, porque no conoces el lugar ni la gente que te rodea, aun así prefieres no elegir el camino recto, huyes de la facilidad que te ofrecen por tu poca afición a las prisas, te estas asegurando tu llegada tardía pero sigues andando, un día es un día, ¿Qué mas da? Piensa tu mente infantil…
Quizá por ese camino no se llegue al mismo destino, cabe la posibilidad de que te pierdas aun más de lo que ya estas y no tengas que empezar el día como te lo planearon al desayunar, si te pones a pensar siempre o casi siempre te ocurre lo mismo, día tras día suelen ocurrirte anécdotas distintas pero que llevan a la misma conclusión: la explosión de tu bella risa, la formación de tus pequeños hoyuelos y el dulce brillo de tus ojos, ¿Qué más puedes pedirme?
Quiero y deseo tenerte aquí conmigo, ya se que me dirás que nunca desaparecerás de mi pequeño corazoncito, que te encargaras personalmente de que no pueda lograr olvidarme ni por un segundo de tu presencia en el, aun así permíteme que te añore, deja que recuerde esas tardes contigo y nuestras largas conversaciones, limítame el tiempo para que se me pasen rápido los momentos de soledad y pueda seguir pensando que una pequeña parte de ti aun cree en mi, aun me da esperanzas para seguir y mas aun que de verdad confía en mi regreso con el inicio del sueño cumplido, créeme cuando te doy las gracias de corazón por ser mi amig@
Entonces descuelgo el teléfono, gracias a dios tengo muchos números a los que llamar, marco las teclas de memoria ya, no me hace falta mirar la agenda para saber que llamo a la persona indicada en cada momento, entonces descuelgas y te escucho hablar, solo con eso parece que no pasa el tiempo, me cuentas tus cosas y soy feliz de oírte de nuevo, porque tu naturalidad al hablar me hace olvidar la distancia que nos separa, porque ya dijimos que nos encargaríamos de mantener el contacto siempre que nos fuera posible
Ya sabes, no olvides nunca que: si tu eres feliz, yo seré feliz ^^

No hay comentarios: