viernes, 4 de enero de 2008

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No sé cuantas veces me habrán preguntado lo de ¿que tal estas navidades? (en concreto fin de año claro) Y, aunque me alegra que la gente se preocupe por mí (o simplemente le interese), he de decir que para mí estas fechas son como unas vacaciones más, para mi solo representan un tiempo de descanso para estar con la familia y disfrutar de buenos y agradables momentos acompañados de la gente que te quiere (con esto también incluyo a los amigos)
Por eso no entiendo el revuelo que me montan cada vez que digo ‘no salí’ (8O) y es entonces cuando me contestan cosas como:
- Pero si ya tienes 18 años (ya ¿y?),
- ¿entonces que hiciste?,
- me podías haber llamado yo….
Y es entonces cuando yo contesto: resulta que cene en casa con ‘my family’, brindamos, nos tomamos las uvas (no sin algún atragantamiento), salimos a la calle (si, a la calle) a felicitar el año nuevo a los guiris del bar de enfrente y nos pusimos a bailar en medio de la calle con la radio puesta en la ventana…
Yo no salí, no porque no tuviera gente con la que salir (ni mucho menos, me sobran personas a las que les “encantaría” que yo saliera con ellas, además me llevarían a rastas si pudieran ;P), si no simplemente porque ‘no me dio la gana’ y porque prefiero pasar mis ratos libres de otra manera, que no bebiendo toda la noche….
No siempre fue así, no he vivido siempre estas navidades sin sentido aparente en las que busco algo a lo que agarrarme para no desistir en mi intento por vivir mejor o simplemente vivir, antes todo era diferente pero eso eran otros tiempos…
En los que la ilusión desbordaba mi rostro, en los que la dulce esperanza de que mi rey mago favorito (Baltasar) me dejara algún juguete con el que jugar, en los que me despertaba temprano para ver el salón la primera, en los que no se me iba la sonrisa de la cara o en los que mi ‘abuela’ nos llevaba de paseo mientras nuestros padres hacían sus compras…
Vale tal vez eche de menos esa época, pero no es solo por eso, no este año, en el que cada vez me doy más cuenta de lo rápido que va la vida, de lo que supone un error o una mala decisión, de lo que se puede llegar a echar de menos a alguien que ya no esta a tu lado, de lo difícil que se puede poner la vida…
Y aun así sigo igual, no aprendo nada, veo pasar los días y no hago nada, me estanco en un pensamiento y no paro de darle vueltas, quizás la vida me dé muchas sorpresas pero yo no sepa aprovecharlas, tal vez me estoy perdiendo demasiado y no me doy cuenta, a lo mejor tienen razón y me tengo que espabilar….
…Ojalá tuviera la fuerza necesaria para cambiar y continuar…

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